viernes, 5 de noviembre de 2010

Kara no Kyuoikai: Episodio 1. ''Mirada hacia lo alto dede lo alto''

Kara no Kyoukai: Episodio 1:Mirada hacia lo alto desde lo alt
Fujoh Kirie: Tánatos

Dirección: Ei Aoki
Estudio: Ufotable
Duración: 48 minutos
Actuaciones vocales:
Ryogi Shiki: Maaya Sakamoto
Kokutou Mikiya: Kenichi Suzumura
Aozaki Touko: Takako Honda
Fujoh Kirie: Rie Tanaka
Resumen:

Una mujer de apariencia caucásica, interroga a Shiki sobre sus cavilaciones acerca de unos suicidios. Ahora, se encuentran en un cuarto que simula singularmente a un estudio u oficina. La mujer desconocida, le confiere datos y percepciones de la policía sobre el misterio de los suicidios en serie, entre los cuales figuran el número de suicidios, y las situaciones emocionales de las jovenes, así como las esbirria posibilidad de que éstas se hayan conocido o esten relacionadas de forma indirecta. También, le hace mención acerca de una aguda observación, la cual, es contradictoria con la de la policía: ls chicas no se conocían pero sus casos estaban relacionados, debido a que ninguna había dejado una nota suicida, pero paradójicamente su muerte tan resaltante e histriónica- se arrojaban desde la azotea de un edificio - terminaba siendo una carta per se, o al menos la simbolizaba. Siendo una carta, un simbolismo textual o indirecto que actúa como una suerte de sentencia al mundo, el hecho que no hayan dejado ninguna significa que no tienen ninguna inquietud sobre la realidad en que se mueven; es decir sólo deseaban desaparecer, no escapar. Pero al final de cuentas la forma de suicidarse transforma a sus intenciones de tautología a contradicción:es decir no querían morir, entonces, es como si las jovenes suicidas, hubieran encontrado una muerte trágica e inesperada al salir a comprar. La mujer le apunta a Shiki que quien inquirió tal paradoja filosófica fue Mikiya, quien yace en el sofá frente al pupitre. El muchacho que dormita en el mueble lo ha estado haciendo desde que comenzó esta conversación, y resultó ser el mismo quien vistó a Shiki aquella noche; el visitante gentil y afable. Al final de este diálogo, la mujer se pregunta cuando volverà su pequeño.




Esa noche Shiki recorre el mismo lugar dónde la mujer, mostrada al principio, se arrojó hacia su óbito, en eso, logra ver asomarse un cuerpo frágil, torcido y reducido en su propia sangre por la calle, esa calle trabajada por el paso de los años y el descuido humano, dicho cuerpo parece ser el de otra fémina suicida. Luego voltea sobre su hombro y logra contemplar un vista insondable, 9 cuerpos flotando, magnánimos, coronando el techo sobre el cual se suspenden, a pesar de no estar afianzados por nada.

Shiki es quien, ahora, informa a la mujer sobre las diversas layas de los detalles de este esquivo misterio. Le advierte; comentando que los suicidios no pararán de suscitarse hasta que mueran ocho personas, pues ella vio 8 cuerpos suspendidos en el aire escoltando a uno, el cual, conturbaba el cielo constelado de azul. La mujer, que coligió acertadamente que la crepuscular visita de Shiki al lugar dónde se daban lugar los suicidios era la razón de su improvisto y, por lo tanto, informado comentario; mostró un excelso inetrés acerca del quimérico caso, además, comentó casualmente acerca del nombre de aquel torcido lugar, el cual fue dado por el apellido por los dueños de los, ahora, pristinos edificios. Los edificios Fujoh, mencionando su nombre a continuación comenzó a describir el porqué de su crepúsculo y, así, pasó a encerrarse en un soliloquio metafísico acerca de la muerte y el tiempo, y como éste último transcurre de forma disonante a comparación de como transcurre afuera de éstos edificios. Expone a la muerte no com un final, sino como el comienzo. El comienzo del olvido; cuando mueres, no desapareces completamente, siempre que la silueta de tu recuerdo se anide en las memorias de aquellos que te recuerden, seguiras viviendo hasta que desaparescas de aquellas aguas tan agitadas que hacen la memoria. Asi, la mujer continúa recitando e hirbanando de forma didáctica la razón alienante cuando vislumbras un paisaje desde un lugar elevado. Al mismo tiempo, Mikiya sigue durmiendo imperturbablemente.


Shiki, en el preciso monento en el cual diambulaba por las calles sobre las cuales se apresuran a caer las gotas de lluvia, cae en cuenta sobre quien podría ser una de las futuras víctimas, evocando una de las acotaciones de la mujer, la cual, se entrocaba con las reflexiones filisóficas de la misma. Esta acotación era la que efería a que las adolescentes suicidas no querían morir en realidad.

Shiki, después, a vistas de esta agria revelación se apresura a visitar nuavamente el edificio, ahora, se topa cara a cara con uno de los cuerpos evanescentes; se precipita una confrontación, Shiki al desesperarse, pues, la mujer de apariencia fantasmagórica, esta a punto de lanzarla por la añiosa varanda, saca su cuhillo y sus ojos vacíos llenados por un negro sedoso, se tornan azules. Apuñala su propia mano para escapar, debido a que era la perte de su anatomía que la mujer usaba para arrastrarla, y, descubrimos que su mano derecha no es, precisamente humana. Durante la caótica situación, las dos intercambiaron sendos accidentes dialéctocos, entre los cuales se logra comprender las afirmaciones de Shiki sobre que ella encontró priemero a Mikiya, respondiendo a la otra, la cual afirmaba histéricamente que ella quería que él la lleve lejos. Ella vuelve a la oficina de la mujer, con la cual vuelve a entablar otra conversación. En la conversación de marras se menciona por primera vez el nombre de la mujer: Touko. Shiki reprende a Touko sobre el aciago destino de su, ahora, extremidad extraviada, por tanto, es Touko la hacedora de tal pìeza intrínseca . De esta manera, comienza otra de sus particulares intercambios retóricos.

Al fin, Shiki, con un nuevo miembro fingido facilitado por Touko; se dirige hacia lo que sería su último conflicto con la mujer de apriencia espectral. Después que chirriaron y se deshacieron en una lid, Shiki, finalmente, a continucación de aseverarle a la mujer acerca de la habilidad de sus ojos, capaces de ver la muerte de todo, irónicament, incluso de los muertos la corta. Shiki menciona sobre aquella desparación digna de recordación, que se asemeja a un lirio roto.

En un cuarto bruñido por la luz que alambica e interroga las paredes, una mujer de aspecto frágil cobra consciencia, en el mismísimo intstante en el que Touko toco a la puerta, y es autorizada a ingresar al recinto con una voz débil, que casi no la toca. Y, sostienen un conversación que aquilata varias particularidades de su pasado. Sus padres, eran los dueños de los edificios Fujoh, y ella le corresponde el nombre de Fujoh Kirie. Padecía una enfermedad desde ya una inocente edad, la cual la tiene postrada a una cama la mayor parte de su s escasos años. Al ser acusada de usar una forma de doble existencia muy particular para así escapar del encierro anatómico, ella aceptó haber aceptado una proposición irresistible de un hombre de obscura identidad. Touko le dicta las dos opciones que debe tener a consideración: hay dos formas de vivir, flotar o volar, morir y encarcelarse, vivir libre en la restricción. Mientras se dirije a lo alto del edificio, ella, musita acerca de su debilidad, y el hecho de que no puede volar, pues es débil. Así la escena con la cual empezó la película en la cual se arrojó hacia su muerte se repite de nuevo al final.

PD: Sé que el resumen es un poco extenso, pero soy muy descriptivo al narrar. Después publicaré mi crítica hacia este capítulo

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